Términos como la digitalización y la ganadería de precisión pueden sonar futuristas y hacer que pensemos en sistemas agrícolas donde todo está hecho por máquinas, pero no es el caso.  En realidad, la ganadería de precisión trata de buscar formas de facilitar y de hacer más preciso el trabajo del ganadero mediante las tecnologías disponibles. 

Desde el principio, toda la teoría de la ganadería de precisión se basa en mejorar y optimizar los distintos procedimientos que debe efectuar el ganadero cada día. Esto incluye varios elementos como la sanidad y bienestar de los animales, el control del uso de recursos, la productividad, etc. También permite recoger datos y compartirlos. Esta es una de las razones por las que los ganaderos europeos y sus socios se acogen al Código de conducta de la UE sobre el intercambio de datos agrarios.

La tecnología inteligente emergente ofrece la posibilidad de que el ganadero pueda detectar y tratar las enfermedades en los animales antes de que se conviertan en un brote que pueda afectar la vida de cientos de animales y destrozar el sustento del ganadero. La utilización de la tecnología inteligente posibilita la detección precoz de enfermedades. Mediante el control continuo del ganado, los veterinarios y ganaderos tienen información en tiempo real a su disposición, lo que les permite actuar para proteger las granjas y la cadena alimentaria de posibles enfermedades.

Las nuevas tecnologías también permitirían a los ganaderos maximizar el uso eficiente de piensos y otros recursos para evitar desperdicios y limitar la huella de carbono de los animales.  

Y quizá más importante, la ganadería de precisión puede favorecer las condiciones de bienestar mediante la medición sistemática y objetiva de los constantes vitales de los animales durante toda su vida para detectar cualquier cambio. Por ejemplo, investigadores en KU Leuven en Bélgica han desarrollado un micrófono y un sistema de algoritmos que emplea aplicaciones de monitorización y análisis acústicos que puedan aislar de otros ruidos el sonido de un cerdo tosiendo. Otro ejemplo es la detección precoz de cojera mediante video análisis. Usada como sistema de alerta, esta tecnología permite que los ganaderos y veterinarios puedan intervenir con más rapidez para reducir el riesgo de que un animal sufra una enfermedad grave y prolongada, reduciendo en algunos casos la necesidad de utilizar antibióticos. 

En España, el proyecto VIGIASAN “Empleo de Tecnologías para evaluar el estado de salud, bienestar y productividad en ganado”, tiene como finalidad principal el desarrollo de tecnologías e innovaciones (software y hardware) en materia de vigilancia en ganado porcino y bovino (extrapolable a otras especies), que permitan la detección temprana de problemas sanitarios.

Estos sistemas pueden configurarse para enviar alertas a los ganaderos y veterinarios por SMS, mediante una App o a través un cuadro de mandos digital, notificándoles en el acto de un posible problema sanitario. En un futuro, esta tecnología podría también estar conectada a un controlador de climatización que adaptase las condiciones como reacción terapéutica a un problema sanitario. ¡Por ello es importante que todos los ganaderos tengan acceso a Internet de banda ancha en Europa!